Corporativo SIMSA
La empresa de origen Lagunero SIMSA deseaba un edificio de oficinas que proyectara su nueva imagen corporativa integradora. Tras un análisis del sistema corporativo existente se propone un diseño que añada valor e integre la comunidad y sea un espacio para la colaboración. Se utiliza un lenguaje accesible y sencillo, pero con identidad. En el terreno se encontraba una bodega industrial que se iba a demoler. Se buscó entender el carácter industrial del lugar, economizar los materiales y utilizar responsablemente los recursos. Se decidió recuperar la estructura de acero para aprovecharla en el nuevo diseño en elementos estructurales y ornamentales. Toda la estructura es aparente de color negro, marca líneas y orden que contrasta con el blanco y concreto de los muros y pisos. El contraste cálido lo da la madera rojiza del mobiliario y los barandales. Se dio un carácter fuerte, limpio, contundente, luminoso y estructurado. El diseño comienza con el acceso principal por la esquina del terreno a visitas y se desarrolla en módulos de oficinas cúbicos de doble altura orientados de norte-sur, llenos de luz natural y amplitud. Cada módulo se conecta por un pasillo distribuidor. Entre cada módulo se encuentran los servicios de las oficinas. Se buscó una conexión y flujo visual continuo en todos los ejes de circulación y en los niveles de planta baja y alta. Grandes ventanales de piso a techo, remates de jardines desérticos y contacto con el cielo para sentirse en el exterior con amplitud. Se buscó una escala que libere y de aire. La escala responde a entender la integración de las personas en su espacio de trabajo. Se hizo gran énfasis en los detalles, tanto de la estructura, diseño de plafones, cancelería, la escalera como escultura en el espacio, fuente exterior, barandales, etc.
Créditos
Cristina Treviño, Arq. Carlos Díaz.